Botón.

Miro el botón sobre el escritorio lleno de papeles, ese botón lo mire toda la noche, pensando en su significado, encontré varios significados que cada uno me aterra.

El botón no es de avanzada, tiene una historia, ¿pero cual?, quizás alguna canción olvidada.

Saber por que me lo diste no tiene sentido para mi mente, no se su verdadero significado.

Sigo mirándolo, lo acaricio, recordando tus manos y las mías danzando, rozándose, generando una locura, una locura dulce con aroma a jazmín al igual que tu piel.

Esa mirada que quiere decirme algo, esa mirada que tiene un lenguaje desconocido para los míos.

El botón sigue en el mismo lugar, estático, detenido en ese tiempo que fue usado, que fue utilizado por tus manos. El botón esta junto al teléfono, quizás quiera regresar a su casa, a su hogar, lo llevaría con su dueña si pudiera, pero no puedo imaginar esa escena, nuestras miradas, miradas infinitas, miradas profundas que desnudan nuestras almas.

El botón me mira, me pregunta, me susurra palabras que no entiendo, le pido que hable claro, pero sigue estático, inmóvil bajo la luz de la lámpara y al resguardo de mi mirada.

Miguek Ulises.